¿Y qué hay de todas esas veces que me pedías que nunca te dejara?
¿Qué hay de esas veces que me dijiste que odiarías lastimarme?
¿Y qué hago con todas esas palabras, que hoy se las lleva el viento?
Te entregué parte de mí, y solo recibo a cambio una gran decepción. Solía creer que me querías. Ahora ya no sé en que pensar.
Sólo quedan esos recuerdos que pasamos y el haberte conocido. Preferiría que las cosas terminaran de otra manera, pero todo no se puede.
De verdad deseo, que algún día encuentres esa paz que necesitas. Y espero encontrar yo la mía, volver a intentar.
El juego no se termina, el show debe continuar.
Nunca hubiera funcionado... Quizás. Como llegaste tan pronto, te vas.
Era cerrar los ojos y dejarte llevar, pero te fuiste yendo...